martes, 1 de mayo de 2012

Fragmentos #1


[Extraído del Capítulo 3 de Un ángel disfrazado de fantasma]

Sentado en la mesa miraba la silla vacía a mi lado e intentaba espantar la silueta de su ausencia, no era tarea sencilla. Cogí el teléfono y sin dudarlo le llamé. Sabía que él estaba pensando en mí en ese momento y necesitaba en cierto modo relajar un poco la tensión emocional que se me estaba acumulando. No quería echarme a llorar antes de subir al avión, aunque la necesidad de soltar ciertas lágrimas reprimidas hacía que me empezase a dar igual. Hablamos un minuto y cuatro segundos, me deseó buen viaje y que me lo pasase bien. Me recordó que le había prometido quedar con él cuando volviese para contarle todo acerca del viaje. Moví mi cabeza aunque no pudiese verme, a cada cosa que dijo, especialmente a la parte de quedar a la vuelta.
Estoy asintiendo —dije cuando me preguntó por quinta vez acerca de mi respuesta—. Te dejo trabajar, nos vemos a la vuelta. Cuídate.
Una mezcla de pensamientos y sentimientos ahogaba mi cabeza con los efectos de la tercera pinta. Por alguna razón, creía que si bebía suficiente alcohol podría dormir en el trayecto y despertar directamente en mi destino.

No hay comentarios:

Publicar un comentario